Microsoft, que adquirió recientemente Skype, el servicio de
comunicaciones por internet que permite realizar llamadas de voz sobre
IP, ha confirmado que no tienen planes para cerrar el sistema, que
ahora mismo es multiplataforma.
De hecho, Skype no solo está
disponible en Windows, Mac y Linux, sino que se lanzó en dispositivos
como iPhone, teléfonos Android o incluso la portátil PSP. Tras la
adquisición, Microsoft anunció que el servicio llegaría a Windows Phone
7, Xbox 360 (con funciones de Kinect) y se integraría definitivamente
en su sistema operativo de ordenadores Windows.
Steve Ballmer,
máximo dirigente de Microsoft, ha querido tranquilizar a los usuarios
de todas las plataformas asegurando que Skype seguirá siendo un
servicio multiplataforma. El movimiento no es de extrañar: Skype suma
muchos clientes a través de todas esas plataformas, y sus ingresos se
basan en el pago de las llamadas desde internet hasta líneas
telefónicas tradicionales, por lo que Microsoft no quiere reducir el
volumen de clientes.
No está claro si esto implicará que Skype
desembarcará, además, en otros sistemas, pero sí se garantiza en
cualquier caso la continuidad del servicio en las plataformas en las
que ya está disponible.
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