Para finalizar esta serie sobre la migración de los puestos de trabajo de una empresa a software libre, vamos a hacer una reflexión que nos ayude a afrontar este tipo de proyectos y, sobre todo, nos aporte una serie de ideas con las que poder argumentar la necesidad de aplicar este tipo de cambios a una organización. Después de revisar cómo hacer un modelo económico, cómo planificar el proceso de migración total o plantearnos una transición gradual, es el momento de revisar algunos motivos por los cuales una migración a software libre podría beneficiar a nuestra empresa. (tomado de www.bitelia.com)
¿Por qué migrar?
Bueno, esa esta es la pregunta clave porque algún motivo debemos dar para iniciar este cambio en nuestra empresa. Para empezar, a medio plazo, vamos a obtener un importante ahorro económico en el coste de licencias (aplicaciones y sistema operativo), eso sí, es un ahorro a medio plazo puesto que el proceso de migración conllevará esfuerzos (internos o externos) y, por tanto, tendrá asociado un coste (aunque no será cíclico).
Por otro lado, podemos obtener un importante ahorro en hardware puesto que, dado que los requisitos son algo menores, podremos ampliar la vida útil de nuestros ordenadores y, por tanto, alargar su amortización. No tener que renovar el parque informático de la empresa con tanta asiduidad y que, simplemente, con aumentar la memoria RAM podamos alargar su vida en un par de años, es un motivo de bastante peso.
Además, gracias al acceso al código fuente, podemos tanto auditar el código de las aplicaciones, mejorarlas y personalizarlas, adaptándolas a las necesidades de nuestro negocio. De hecho, muchas de estas personalizaciones se ponen a disposición de la comunidad, haciendo que todos los usuarios se vean beneficiados.
Desde el punto de vista de la gestión, la utilización de soluciones abiertas garantiza nuestra independencia tecnológica (puesto que no estamos sujetos a una solución de un fabricante concreto) y nos abre el horizonte a que nos puedan prestar servicios múltiples empresas. Pero quizás, una de las garantías más importantes que nos brinda este modelo es el de la interoperabilidad que, gracias a que el software libre se fundamenta en estándares abiertos, nos garantiza con otros sistemas o componentes. La interoperabilidad es muy importante, tanto en el ámbito privado como en el público (por ejemplo, en España hay una norma que lo regula en el ámbito de las Administraciones Públicas)
¿Qué problemas nos vamos a encontrar?
La principal barrera que nos vamos a encontrar es el cambio de mentalidad necesario para abordar este proyecto con éxito. Decíamos en la segunda entrega de esta serie que había que gestionar adecuadamente el cambio organizacional y, para ello, tendremos que formar adecuadamente a nuestros empleados (en las nuevas aplicaciones y en el nuevo entorno, si también cambiamos el sistema operativo) y, además, desmitificar algunos de los prejuicios que hay alrededor del mundo del software libre.
La resistencia al cambio es algo intrínseco al ser humano, si alguien está acostumbrado a trabajar de una manera determinada y, además, le va medianamente bien, no va a querer cambiar, menos aún, si el cambio viene obligado. El primer mito a derribar es el de la complejidad, es decir, la creencia de que las aplicaciones libres son complicadas, algo que no tiene por qué ser así sino que, simplemente, hay que aprender a manejarse en un entorno nuevo (lo cual no implica mayor complejidad).
Otro mito a derribar es el de la falta de soporte y asistencia técnica, algo que no es cierto y que, además, gracias a la adopción del software libre en algunas Administraciones Públicas, ha posibilitado la creación de un tejido empresarial potente.
Dependiendo de la especialización de nuestros empleados y de nuestra empresa, quizás nos encontremos ante aplicaciones que no van a poder ser migradas. Estas situaciones habrán de ser tratadas con especial cuidado porque, mal llevadas, podrían suponer la cancelación de la migración y la pérdida de confianza en este modelo. Bien llevadas, simplemente, nos llevarán, en el peor de los casos, a mantener pequeñas islas con software privativo.
Conclusiones
Después de estos cuatro artículos dedicados a la migración al software libre, creo que podemos sacar algunas conclusiones que nos pueden ser útiles a la hora de enfrentarnos a este tipo de proyectos:
Beneficios económicos, a medio plazo y largo plazo gracias al ahorro en licencias puesto que, en un corto plazo, el hecho de realizar la migración nos hará incurrir en un coste (consultoría, migración, etc) que podría equipararse a la renovación de licencias.
Es un proyecto que requiere una correcta planificación y gestión del proceso, en el que debemos valorar, correctamente, todos los factores que influyen en él: procesos de la empresa, aplicaciones que se utilizan, conocimientos del personal, formación necesaria, etc.
Este tipo de proyectos, al suponer un cambio importante en la cultura de la organización, necesita el apoyo firme y decidido de la Dirección. Si no confían en este proceso, al mínimo escollo, podrían cancelarlo. La resistencia al cambio que podemos encontrar va a ser fuerte, por tanto, los empleados necesitan ver que la Dirección apoya y promueve este cambio.