Este año y como venimos haciendo desde el 2011, los amantes, promotores, difusores y usuarios del SWL en este segmento cardinal de la ínsula, hemos de realizar nuevamente la fiesta del software libre porque «un día de fiesta es un beneficio público. Los días de fiesta reponen las fuerzas y suavizan las iras» y nosotros, fieles al Magno de Dos Ríos, concordamos con él en este magnífico apotegma.
La sede será la Universidad Pedagógica Blas Roca Calderío y, tratando de no desentonar, tenemos pensado iniciar el evento a las 9.00 am.
El programa de la fiesta es el siguiente:
1.-Apertura del evento.
Hora: 9.00 am.
Lugar: Teatro de la universidad.
2.-El software Libre y la Memoria Histórica de la nación cubana.
Hora: 9.15 am.
Lugar: Teatro de la universidad.
3.-La suite ofimática Libre Office.
Hora: 9.45 am.
Lugar: Teatro de la universidad.
4.-El software libre en los procesos formativos educativos del siglo XXI.
Hora: 10.15 am.
Lugar: Teatro de la universidad.
5.-El software libre como soporte en la administración de las redes educativas.
Hora: 10.45 am.
Lugar: Teatro de la universidad.
6.-Copia de software libre, intercambio e instalación de programas.
Hora. 11.15 am.
Lugar: Laboratorios de computación.
Mientras el Comité Organizador se compone de los elementos que a la letra se leen:
1.-Grupo de Usuarios de Tecnologías Libres de Cuba (GUTL).
2.-Universidad Pedagógica Blas Roca Calderío.
3.-Joven Club de Computación y Electrónica.
4.-Archivo Histórico de Manzanillo.
Y como en tiempos mediáticos quien no está en los medios no está, se ha coordinado con el telecentro local nombrado GolfoVisión un espacio donde el Dr. Luis Ernesto Barrueco Gallardo y el Lic. Delio G. Orozco González, expondrán historia, beneficios y experiencias del uso y explotación del software libre.
La convicción de que el SWL es «socialmente justo», «tecnológicamente viable» y «económicamente sustentable», deviene más que estímulo para que apostemos seriamente por su difusión y empleo y si estos argumentos no resultan suficientes; entonces, el goce ético de la libertad que nos reporta su empleo ofrece impulso irrecusable para los hombres que viven en esta ínsula caribeña, la cual, como cimitarra redentora aún esgrime la gracia que sus habitantes originarios le dieron: Cuba.