Comentario a «El perfecto neoanalfabeto y otras bloguerías»

El perfecto neoanalfabeto y otras bloguerías, es un libro del crítico de cine cubano Juan Antonio García Borrero; quien, desde hace años, mantiene un interesante blog sobre cultura y cine cubano en https://cinecubanolapupilainsomne.wordpress.com.
Hasta allí me llegué y resultado del análisis de lo escrito por su autor en el artículo promocional, mi amistad con él y las ideas que al respecto tengo; aquí les va un comentario no publicado,  no porque Juan Antonio no deseara; sino, porque otro texto, más impresionista, fue el primero que le llegó; no obstante, como el espíritu  es el mismo y las esencias idénticas, lo comparto -como debe ser-, con esta nuestra cofradía.
La pirámide del conocimiento empieza con el dato como unidad básica y termina, en la mayoría de los enfoques, en la inteligencia; sin embargo, tal figura geométrica se me antoja trunca toda vez que debiera coronarla la sabiduría, categoría brotada de la fusión sistémica y constante de la capacidad de discernimiento; o sea, la inteligencia misma y ese afluente vital y esquivo de la conducta humana: la ética.

El libro de Juan Antonio lanza al ruedo un tema que, sin duda alguna, es trasvasado por ese componente que establece la relación entre el bien y el mal, norma el código moral de la conducta, establece que aspiraciones son legítimas y cuales no y remata su cometido fijando el sentido de la vida. La alfabetización tecnológica debe concebirse como un medio, no como un fin; por cuanto, uno aprende a leer y  escribir no para hacer uso fatuo de dichas facultades; sino, para entender y hacerse entender, empero, esa relación biunívoca del conocimiento que puede conducir a la libertad pues coloca al hombre en cualidad de demiurgo al darle la posibilidad de escoger o no y en consecuencia construir o destruir, debe tener, a modo de cimiento primario, el respeto a la diversidad, la capacidad de entender los puntos de vista del semejante, el hábito de pensar por si propio, la costumbre de poner sus ideas a juicio no porque sean suyas, sino porque las cree ciertas y la apertura mental para  entender que no importa el color, el sexo, las creencias, las orientaciones o los gustos de quienes, en otra dirección IP, nos hacen partícipes -bytes por medio-, de su cosmovisión.

El caso Cuba

En el caso cubano y de forma mayoritaria, el desconocimiento al componente ético está dado apenas se enciende la computadora. No lo dudo, habrá quien me tilde de fundamentalista; empero, martilla en mi sien como recordatorio y magisterio la respuesta de José Martí cuando Juan Gualberto le hizo saber que tenía en su poder una maleta ahíta de dinero que le había entregado el bandolero Manuel García, Rey de los campos de Cuba: «La revolución ha de ser honrada desde la raíz o no será».

Es el sistema operativo de la compañía Microsoft el que da vida a la casi totalidad  de las computadoras cubanas, incluidas las escolares, sistema obtenido ilegalmente lo que nos hace usuarios de un producto pirateado y en consecuencia piratas o -si resulta muy duro el término-, corsarios de la informática. Muchos escudan su actitud en el hecho de que la archiconocida compañía tiene génesis y asiento en el país que bloquea y entorpece la vida insular; pero por ese camino, según Desmond Tutu, todos hemos de quedarnos ciegos al aplicar la Ley del Talión: «ojo por ojo y diente por diente»; además, la única fuerza que podemos esgrimir ante formidables colosos es la de la razón y esta se quiebra y va a bolina cuando prevaricamos en casos como estos. Luego, es inútil la queja y la protesta ante la OMC porque la Bacardí roba a Cuba la patente del Havana Club.

¿Que hacer entonces?

¿Cuál es pues la conducta a seguir ante tal disyuntiva ética? Una sola: el uso de Software Libre (SWL). Fue el controvertido y exingeniero del MIT, Richard Stallman; quien, considerando el conocimiento del hombre patrimonio de la humanidad y rebelándose contra el poder monopólico de las grandes compañías de software, el creador de la Free Software  Foundation y legislador de las cuatro libertades básicas del movimiento:

  1. La libertad para ejecutar el programa sea cual sea nuestro propósito.
  2. La libertad para estudiar el funcionamiento del programa y adaptarlo a tus necesidades.
  3. La libertad para redistribuir copias y ayudar así a tu vecino.
  4. La libertad para mejorar el programa y luego publicarlo para el bien de toda la comunidad.

El uso del SWL posibilita, a parte del goce benéfico de las libertades supradichas, construir y modificar con manos e inteligencia propia, haciendo valedero por esta vía el apotegma martiano de que los oficios naturales del hombre son crear y transformar.
La aseveración de que el software libre es reino de gurúes o hackers resulta ignorancia supina; quizás a finales del siglo pasado lo fuera, ya no lo es, ¿por qué entonces no ponemos en práctica la guía de migración que tiene entre los cubanos más de cinco años?, ¿por qué no se da empleo al talento de cientos de ingenieros graduados en la UCI?, que la actividad humana es un monstruo, si no crea devora. El marasmo en que el subrealismo tropical nos envuelve parece enajenarnos; por ello, Assange, Snowden y Mannig nada tienen que decir. Debe llamar a capítulo el hecho de que Alemania, la economía más sólida de Europa continental, está migrando todas las dependencias estatales a SWL; mientras Venezuela, país con la cuarta reserva de petróleo del mundo, Google, la Estación Espacial Internacional, la Fuerza Áerea de los Estados Unidos y hasta Wall Street emplean sistemas operativos libres.

Al nacido bajo el signo de Windows le resultará difícil interactuar con sistemas y plataformas abiertas; verbi gratia GNU/Linux; por tanto, desterrar de la educación cubana la enseñanza de sistemas privativos por los cuales no se paga -en consecuencia pirateados-, es gestar en la necesaria alfabetización tecnológica a la que está abocada la sociedad cubana, una simiente ética que dará a los recién alfabetizados la argamasa necesaria para completar el segmento que más comúnmente falta a la pirámide del conocimiento: la sabiduría, resultado esta última de la aplicación práctica de la inteligencia y el empleo consecuente de la ética. Que así sea.

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Delio Orozco González

Publicado por Delio Orozco González

Forma parte de GUTL desde el 6 diciembre, 2011.

Este artículo tiene 14 comentarios

  1. Delio, me inclino ante ti una vez mas, es un excelente artículo. Quisiera poder leer el libro, pero no me ha sido posible adquirirlo

  2. Paradix:

    Gracias por tu reconocimiento. El libro fue publicado por la Editorial Oriente en la colección «Diálogo». Juan Antonio García Borrero vive y trabaja en Camagüey.

    • Disculpa mi atrevimiento pero intente «maquillar» el comentario sobre un libro para asemejarlo un poco al «lenguaje» de los blogs y buscar que el artículo que esta muy bien elaborado no se quedara solo en texto plano. Felicidades por el artículo

  3. Donde dice «todos hemos de quedaremos ciegos» no sera «todos hemos de quedarnos ciegos»??

    Excelente articulo. +100

  4. Hace unos días me tope con un Libro (me comentaron que existen varios) de Teología que en su sección de derecho de autor decía: «Estos derechos no se aplican a Cuba» ya que la autora a estado en nuestro país.

  5. Delio:

    Ante todo mis saludos y las felicitaciones por el nuevo año. Comparto plenamente sus ideas expuesta en este artículo, creo que la necesidad de usar SL va más allá de las libertades, el componente ético es más importante que cualquier otro elemento que aboque a su uso, y precisamente la escuela cubana debe de asumir su papel en el fomento de esos valores desterrando de una vez de sus PC las aplicaciones privativas que no hacen más que apoyar la ilegalidad. Precisamente el 1ro de enero de este año publiqué un artículo-noticia, sobre el papel de la escuela en el fomento de las aplicaciones y recursos educativos libres y la instauración del «Día de la Educación Libre», como vía para lograr las verdaderas libertades en el campo del conocimiento y el fomento de los valores éticos. Este es la dirección del artículo.
    http://carlosp.cubava.cu/2014/01/celebracion-del-dia-de-la-libertad-de-educacion/

    Saludos

    Carlos

    • Carlos:

      Hace dos días tuve la oportunidad de visitar su blog que aboga por el uso de alternativas libres en los procesos de edición de textos y sentí satisfacción por su empeño que, me parece logrado y útil. Me atrevo a sugerirle abra el abanico a otras posibilidades como Abiword y Gnumeric.

      Por cierto, si bien es cierto que tenemos la posibilidad de instalar desde nuestros repositorios -en el caso de OpenOffice-, solamente el diseñador de presentaciones, no hay o mejor, no conozco, una aplicación de escritorio que de forma independiente se dedique a esta tarea y hago la salvedad «de escritorio» porque he visto algo para estos fines pero desde el web.

    • Carlos
      Visité su portal y me agradó mucho, sólo que me quedé en ascuas cuando noté que no hacía mención siquiera a mis herramientas LyX y Scribus, estas las uso aún más que cualquier office
      Saludos
      Alex

  8. Una excelente entrega este artículo que nos dejas Delio. Creo que no se puede ser más elocuente. Cuba debe ser consecuente con lo que predica ante el mundo, no podemos darnos el lujo de reclamar cuando nos violan nuestras patentes y de luego no aceptar los reclamos de otros cuando violamos las de ellos. Si no me respetas, no te respeto… y la Ley del Talión impera. Si alguien viola, que no seamos nosotros, el Bloqueo de EE.UU no nos da inmunidad ni derechos ante otros países del mundo, como podría ser Rusia (Kaspersky), por poner un ejemplo y todos sabemos que violamos sistemáticamente las licencias de Kaspersky y sin embargo Rusia tiene excelentes relaciones con nosotros. Creo que lo que hoy ocurre es que la ley en Cuba no es lo suficientemente firme en este ámbito del actuar social y nos hemos acostumbrado a violar patentes y derechos de autor.
    Por otro lado, coincido en que la educación cubana debe librarse de una vez y por todas del estigma del Software pirateado y educar a nuestros hijos en la ética del respeto a los demás, de la aceptación y la tolerancia, del espíritu de compartir.
    saludos,
    lpozo

  9. Delio y BishopWolf, mis saludos para ambos y las gracias por sus opiniones, y el reconocimiento a mi trabajo, que convencido estoy que aún le falta mucho para lograr realmente la intención de difundir el conocimiento libre, tendré en cuenta ambas opiniones y me dedicaré a buscar información relacionado con los temas que me proponen.

    Saludos

    Carlos
    http://carlosp.cubava.cu

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